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El Papa recibió el pañuelo verde de manos de una joven de CDD Argentina

Un símbolo de libertad y una oportunidad para preguntarnos qué iglesia queremos.

Milagros Acosta es de Santiago del Estero, catequista, integra la Red de jóvenes de CDD Argentina. El Papa Francisco recibió de sus manos el pañuelo verde, nuestro símbolo de libertad.

Milagros Acosta es de Santiago del Estero, catequista, integra la Red de jóvenes de CDD Argentina. El Papa Francisco recibió de sus manos el pañuelo verde, nuestro símbolo de libertad.

Este 5 de abril se estrenó el documental «Amén, Francisco responde», en el que participó Milagros Acosta, integrante de la Red de jóvenes de Católicas por el Derecho a Decidir Argentina. La convocatoria llegó en 2022 a nuestra sede, de la mano de la productora del audiovisual dirigido por Jordi Évole y Marius Sánchez, desde donde sugerimos el nombre de esta joven catequista oriunda de Santiago del Estero. Ella viajó para encontrarse con Francisco y con quienes, sin conocerse previamente, llegaron a Roma desde diferentes latitudes y con un listado interminable de inquietudes y preguntas.

Valiente, emocionada y con solvencia, Mili tuvo la oportunidad de interrogar acerca de por qué la Iglesia sigue condenando a aquellas mujeres que, en ejercicio pleno de su autonomía y de su libertad de conciencia, deciden abortar. Desde la escucha atenta, defendió la posibilidad de acompañar respetuosamente esas decisiones. Entre sus preguntas, interpeló al Sumo Pontífice sobre por qué las mujeres siguen sin poder ocupar lugares de jerarquía dentro de la iglesia. «¿Si no fuera feminista, sería mejor cristiana?», preguntó, recordando el largo proceso que implicó para ella nombrarse feminista y creyente hasta entender que lejos de ser polos opuestos, ambas cosas son parte del ejercicio coherente de su fe.

Sus interrogaciones y gestos son también parte del amplio entramado sostenido por la Red de Jóvenes de CDD desde su conformación en 2017. En su voz se vierten las múltiples reflexiones, argumentos y trayectorias compartidas por quienes desde diversas provincias argentinas participaron, entre otras acciones, de la Escuela juvenil feminista Enredades: un espacio de pensamiento y acción colectiva para abordar problemáticas actuales que son centro de las preocupaciones de las nuevas generaciones.

Como un símbolo de libertad personal y colectiva, Mili entregó el pañuelo verde —emblema de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito— a Francisco, quien agradeció el gesto recibiendo el abrazo emocionado de esta joven argentina.

Amén aborda el encuentro entre la máxima autoridad de la Iglesia católica y diez jóvenes que, con trayectorias diversas y provenientes de distintas partes del mundo, interrogan a Francisco acerca de temas controversiales para la jerarquía. Un diálogo intergeneracional que, a partir de la pregunta, desata profundas reflexiones acerca de la necesidad de transformar las estructuras de poder y las prácticas hacia el interior de la iglesia, así como el modo en que esta institución se ha posicionado en los últimos tiempos ante temas fundamentales para la sociedad.

¿Desde qué lugares les jóvenes están poniendo en discusión el poder? Con testimonios que conmueven por su profundidad, elles hablan de aquellos temas que les preocupan. La discriminación y el racismo; el posicionamiento de la Iglesia católica ante el aborto; los abusos eclesiásticos y la pederastía; la intolerancia y las violencias hacia las identidades sexuales diversas; la migración; el acceso de las mujeres al ministerio ordenado y el reconocimiento del liderazgo de religiosas y laicas dentro de las estructuras eclesiales; el trabajo sexual, forman parte de algunas de las temáticas que aborda este documento fundamental para comenzar a desandar el silencio. Son interrogantes movilizantes e inquietantes que expresan profundos cuestionamientos y dan lugar al diálogo entre posiciones diversas, desde la comprensión, la escucha, la compasión, la vocación de transformación y la esperanza.

«Donde hay duda, hay libertad», decimos desde nuestra institución. La posibilidad de seguir preguntando quizás sea ese espacio de transformación que buscamos fortalecer, en cada encuentro y en el trabajo sostenido de las redes que en distintas partes de nuestro país y del mundo siguen bregando por mayores derechos y más libertades.