Católicas por el Derecho a Decidir, junto a lideresas de doce provincias argentinas, elaboró un monitoreo que analiza en forma detallada cómo es el acceso a la salud sexual y reproductiva en pueblos indígenas y poblaciones campesinas de 12 provincias de Argentina.

Nada es más comunitario que la posibilidad de reconocerse en el territorio, tejer redes para hablar y contar las propias vivencias para buscar soluciones. Ese es uno de los hilos invisibles que sostienen el “Monitoreo sociocultural y lingüístico de acceso a la Interrupción voluntaria del embarazo y derechos sexuales y reproductivos en pueblos indígenas y poblaciones campesinas en argentina”, el resultado de 4 años de trabajo, impulsado por Católicas por el Derecho a Decidir y concretado junto a lideresas y referentas de las comunidades.

En lo que respecta a derechos de mujeres y personas LGBT Argentina transitó un año muy particular. En noviembre de 2023, tras las elecciones presidenciales, el discurso anti agenda de género se profundizó y se materializó en un feroz recorte que comenzó con el cierre del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidades. Luego continuó con el desmantelamiento de programas como Acompañar, la Línea 144, Plan ENIA (Embarazo no intencional adolescente) y el vaciamiento de las políticas de salud sexual que se reglamentaron tras la aprobación de la Ley 27.610 de interrupción voluntaria del embarazo.

Por primera vez desde el regreso de la democracia, la Argentina no tiene un organismo gubernamental que se ocupe de atender la violencia de género, negada sistemáticamente por el gobierno de turno. Esta negativa de problematizar sobre la desigualdad, cobró forma el 11 de noviembre cuando el país se convirtió en el único de 170 (13 se abstuvieron) que votó en contra de una Resolución de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas sobre prevención y eliminación de todas las formas de violencia contra mujeres y niñas.

Días antes, también había votado en contra de una Resolución de la Asamblea General sobre los derechos de los pueblos indígenas, que promueve el acceso a la justicia, la protección del medio ambiente y la preservación de culturas y lenguas de los pueblos originarios. De esto no se retractó hasta ahora.

Una herramienta para pensar los accesos

“Con los monitoreos buscamos tener evidencia, y esa evidencia es importante para pensar un país”, explica Mónica Menini, coordinadora del área de cabildeo de Católicas por el Derecho a Decidir.

El exhaustivo informe al que llegó Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) tuvo como punto de partida un reunión realizada en 2021 en la que se reconocieron diversas limitaciones de personas gestantes de comunidades indígenas y campesinas en el  acceso a su derecho a interrumpir el embarazo. En esa ocasión se convocaron a lideresas de ocho provincias a una primera reunión para proponerles un trabajo en conjunto. De allí salió la propuesta de trabajar en derechos sexuales y reproductivos, y llevar a cabo un monitoreo sociocultural y lingüístico en sus territorios.

“Solamente estas sujetas políticas que están dentro del movimiento feminista nos pueden acompañar a las demás y a los demás a pensar un país con la inclusión de quienes, en la ruralidad, en la pobreza, en las deficiencias estructurales del sistema, habitan sus territorios. Tenemos que pensar junto con ellas el país que queremos”, explicó Menini.

El informe busca brinda un panorama detallado y actualizado sobre la atención integral de la salud sexual y reproductiva en población indígena y campesina de 12 provincias de Argentina: Jujuy, Salta, Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero, Córdoba, Buenos Aires, Chubut, Río Negro, Neuquén, Chaco y Mendoza.

Cómo se pensó la investigación

El monitoreo se desarrolló a partir de la metodología de investigación intercultural y fue realizado en seis etapas, en las cuales se buscó que las participantes sean investigadoras interculturales activas, que reconocen y valoran la autoría colectiva indígena y campesina, según explica en detalle del informe. Ésa fue la base en la primera etapa del monitoreo a la que se llegó luego de un año de trabajo entre tres referentas de CCD: Verónica Azpiroz Cleñan, politóloga mapuche (Los Toldos, provincia de Buenos Aires); Nancy Segundo, médica qom (Bermejito, Chaco), y Carina Liziardi, médica no indígena de Formosa.

En una segunda etapa se validó el monitoreo y se capacitó a las lideresas indígenas y campesinas monitoras. Luego, en una tercera etapa se digitalizó el material, y en la cuarta se recolectaron los datos. Una vez concretada la recolección de datos, las investigadoras indígenas y campesinas analizaron en conjunto los resultados del monitoreo y se elaboró un informe preliminar que dio paso a la sexta etapa.

“Este monitoreo ha llevado adelante una metodología en la que las compañeras lideresas indígenas armaron un instrumento poco común porque tiene una perspectiva indígena, que es diferente a otros instrumentos. Ellas pusieron sus sentipensares, sus visiones territoriales, y una mirada de las propias vivencias que se tienen en la ruralidad cuando se habla de acceso a salud. Y, en este caso, a derechos sexuales y reproductivos en particular”, detalló Menini.

Con respecto al contexto en el cual se presenta el exhaustivo trabajo de CCD junto a las lideresas, Menini expresó: “Estamos en una situación muy complicada. Los pueblos indígenas están luchando por su territorio, por cuidar el agua, por cuidar la biodiversidad. Y ante un gobierno negacionista de los derechos de los pueblos indígenas, parece más importante hablar de territorio, de agua, de crisis climática, que de derechos sexuales y reproductivos. El monitoreo muestra cómo estas circunstancias son obstáculos enormes para las mujeres y para sus derechos sexuales y reproductivos”.

El monitoreo se realizó teniendo en cuenta una serie de leyes y tratados que conforman, en la Argentina, el marco jurídico para el acceso a los derechos sexuales y reproductivos. Se lo puede consultar en este código QR:

Las autoras del trabajo son 25 lideresas indígenas de diferentes etnias que habitan Argentina. Ellas realizaron una serie de recomendaciones dirigidas a decisores y decisoras dentro del sistema de salud público, a las propias comunidades indígenas y al movimiento feminista. “En la presentación nos interesa, en primer lugar, escuchar a las lideresas respecto de los resultados obtenidos en el Monitoreo y en una segunda parte debatir con ellas sobre las recomendaciones que nos presentan, dirigidas a diversos actores sociales»

pero también, en una segunda parte, debatir sobre las recomendaciones a estos tres actores sociales”, finalizó Menini.

Las 25 autoras son Susana Rosales, Lorena Monroy, Gabriela Elizabeth Situe, Belén Encina, Mery Lucas, María Eugenia Chaile, Ornella Paz, Juana Antieco, Vanina Villanueva, Laura Beatriz Manquel, Florencia Ortiz, Lidia Antonia Granero Magallan, Ariana Anahi Nigg, Maricel Rosales, Marina Vanesa Barrientos, Noelia Chumbita, Verónica Azpiroz Cleñan, Valeria Alejandra Carrizo, Sofía Nicole Situe, Cecilia Elena González, Huillen Bustamante, Yuliana Arce Pigen, Leticia Curruhuinca Piñen, Sara Cayun, Lidia Nancy Rocha, Nancy Segundo

La coordinación general estuvo a cargo de Mónica Menini, con la asistencia de Ornella Steffanazzi, Perla Prieto y Gabriela Franchini. El diseño del monitoreo fue de Verónica Azpiroz Cleñan con revisión de Carina Liziardi, Nancy Segundo y Mónica Menini, y la metodología fue implementada por Mónica Menini y Verónica Azpiroz Cleñan

La presentación del “Monitoreo sociocultural y lingüístico de acceso a la Interrupción voluntaria del embarazo y derechos sexuales y reproductivos en pueblos indígenas y poblaciones campesinas en argentina” se realizará el jueves 12 de diciembre a las 17 en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo, Sarmiento 2037.