En el último número del Boletín Católicas, feministas y diversas recuperamos los debates que fuimos dando, mes a mes, a lo largo de 2025. Reunir las reflexiones que diversas voces referentes del activismo y el pensamiento nos fueron compartiendo, es una manera de sostener una conversación pública sobre el presente: un tiempo difícil, marcado por retrocesos en derechos, discursos autoritarios y disputas abiertas que ponen en tensión la democracia y la vida en común.
Los textos incluidos en este dossier al que llamamos Reexistir el presente: Pensamientos, acciones y debates urgentes nacen del intercambio, la escucha y la escritura compartida. No buscan ofrecer respuestas o certezas, sino insistir en la pregunta, el pensamiento crítico y la necesidad de desplegar y ensayar claves de análisis colectivas, incluso —y sobre todo— cuando el contexto invita al repliegue.
Los textos que integran este dossier dialogan con ese escenario desde distintos registros y tradiciones políticas. Abordan la avanzada de las ultraderechas y la llamada “batalla cultural”; el debilitamiento de los consensos democráticos y del Estado laico; la rearticulación entre religión, política y poder; la historia de organizaciones colectivas que hicieron de la lucha sindical y comunitaria una práctica de dignificación; la circulación social de los discursos de odio; y la pregunta por la crueldad cuando amenaza con volverse costumbre.
Lejos de reducirse a diagnósticos, estas reflexiones insisten en una pregunta compartida: cómo sostener formas de vida más justas cuando el presente empuja al aislamiento, al miedo y al ensimismamiento individual. Allí aparece una idea clave que atraviesa este compendio: la necesidad de desbordar las clasificaciones y los encierros identitarios, recomponer alianzas amplias y volver pensable una política que no renuncie ni a la igualdad ni a la libertad, aun en condiciones adversas.
Este conjunto de textos da cuenta de una apuesta común: no abandonar la crítica, no naturalizar el daño, no aceptar como inevitable la degradación de lo humano. Pensar el presente, en este marco, es también una forma de resistencia. Una práctica que enlaza memoria, articulación y acción colectiva.
Reexistir el presente no es adaptarse al tiempo que nos toca, sino insistir en habitarlo de otro modo: sosteniendo pensamiento, comunidad y organización allí donde se busca imponer el cierre, la crueldad y la resignación. En ese camino, este dossier ofrece algunas claves para seguir pensándonos juntas y sostener preguntas abiertas frente a un contexto que intenta clausurarlas.
